19/12/2016 - Con el cepillo dental se elimina la placa bacteriana de las caras externas e internas de los dientes y las caras oclusales, pero faltaría limpiar los espacios interdentales, que son inaccesibles con el cepillo dental habitual.
Y es que el cepillo dental sólo limpia el 60% de la superficie dental. ¿Entonces, como limpiamos el 40% que falta? Para limpiar estas superficies dentales que faltan y que son de difícil acceso. Se recomienda hacer servir el cepillo interdental una vez al día como mínimo, convirtiéndolo en un hábito saludable diario.
Unas encías rojas y sangrantes pueden ser causadas por acumulación de la placa bacteriana que no ha sido eliminada correctamente. Por tanto si al uso del cepillado dental manual o eléctrico le añadimos el uso de un accesorio de limpieza interdental, conseguimos una mejoría en la salud de la encía y se reduce significativamente la placa bacteriana.
¿Y que se utiliza?
Para evitar los problemas periodontales y las caries, es importante una correcta higiene oral, tanto en los dientes como en los espacios interdentales existentes entre ellos. Para conseguir la limpieza de estos espacios, la alternativa más utilizada y eficaz es la seda dental con cera o sin, con flúor o sin. Generalmente la seda dental se utiliza cuando el espacio que hay entre los dientes está cerrado o es muy estrecho (no se ha perdido hueso al lado de los dientes).
Con el cepillo dental sólo limpiamos el 60% de la superficie dental.
Cuando existen espacios abiertos entre los dientes porque se ha perdido hueso de soporte , es decir, cuando hablamos de periodontitis, se aconseja utilizar los cepillos interdentales (interproximales), que son importantes para acceder a los espacios interdentales y dejarlos libres de placa bacteriana y restos de comida.
Existen en el mercado muchas marcas, formas y medidas diferentes de cepillos interdentales. Se ha de escoger la medida y el grueso adecuado en función de la anatomía de los espacios. El cepillo interdental tiene que pasar justo por el espacio interdental, llevándose la placa bacteriana que puede quedar entre los dientes. Si el cepillo pasa sin dificultad, no se tendrá que utilizar; al contrario, si no tenemos suficiente espacio, nos podemos hacer daño a la encía pasando el cepillo con una fuerza excesiva.
Cuando la enfermedad periodontal está activa, los espacios interdentales inicialmente son más pequeños porque tenemos el tejido inflamatorio de las encías, la placa y el cálculo. Cuando se desinflama la encía después de un correcto tratamiento periodontal, los espacios aparecen como más amplios. No son los cepillos interdentales los responsables del aumento de la medida de los espacios interdentales (como muchos pacientes creen), sino la desinflamación de los tejidos y la eliminación de los cálculos existentes en estas zonas.
